jueves, 26 de noviembre de 2015

Este coche es una ruina!!! y ahora la correa de distribución (305.000 km)

Mi taller de confianza

Bueno han pasado ya 150.000 km desde que cambie la última correa de distribución y según mi planificación tocaba cambio ahora, con 305.000 km, y ya cuando cumpla los 450.000 km veremos que decisión tomamos. Si está el coche bien y coincide con una buena excusa, como que las ruedas están nuevas o que acabo de cambiarle los amortiguadores, seguiré con él hasta que aparezca una avería importante. A estas alturas habéis descubierto que el título era un poco sensacionalista, con el ánimo de captar vuestra atención.

El problema de esperar hasta que se caiga a pedazos es que su sustituto no podrá esperar mucho y por tanto tendré que conformarme con lo que haya disponible en los concesionarios. Por otro lado, el hecho de que aún me queden 3 o 4 años, tiene la ventaja de que daré tiempo a la industria automovilística para que vaya mejorando su catálogo de vehículos eléctricos, consiguiendo mayores autonomías y reducciones en el precio. Por soñar que no quede. En todo caso tengo claro que el próximo no se alimentará de gasoil y como poco será híbrido.


Tensor de la correa en perfecto estado
Pero vamos a lo que nos acontece por ahora; pregunté nuevamente a mi taller de Renault por el precio del cambio de distribución; recordar que lleva aparejado un cambio de la bomba de agua. Como siempre su respuesta fue de lo mas concreta: "como unos 700 € o así". Como la experiencia en mi anterior cambio ha sido excelente, recordar que Renault califica esta operación de complicada y que no debe dejarse en las manos de un profano, volví a pedir presupuesto en mi taller de barrio; aquel al que recurro para ciertas operaciones como la que acontece. Me ofertan todo el kit con mano de obra por 471 € con el correspondiente IVA incluido. Me advierten de que no es el recambio original pero que es de muy buena calidad.

Kit de Gates
Aquí dudé un poco; durante unos segundos soñé con la agradable sensación de que una avería gorda, sin duda provocada por utilizar un kit no original, me obligase a cambiar de coche prematuramente. Recordé ese olor a plástico, como el día en el que lo recoges en el concesionario parece que tenga mas de 24 horas... y acepté; me lié la manta a la cabeza y acepté. Al fin y al cabo para eso está este blog, para experimentar por vosotros con otras opciones con las que me encuentro por el camino. De momento, todas las decisiones tomadas han ahora han sido acertadas; empezando por la mas arriesgada; comprar un Renault de mil cuatrocientos y pico centímetros cúbicos pretendiendo ponerle una fecha de caducidad elevada.

Bomba de agua tras 150.000 km
La operación de cambio duró unas 4 horas. El kit está compuesto por la correa de distribución, correa auxiliar y bomba de agua; modelo PowerGrip de Gates que en Oscaro cuesta 105€. A esto hay que añadirle el mecanismo tensor de la correa. Tambien se derrama una parte del liquido de refrigeración que hay que reponer.

Correa de distribución sustituida
Así como en la anterior ocasión la bomba de agua estaba en las ultimas, esta vez todas las piezas y las correas tenían un aspecto impecable. Vamos que aparentemente podría haber estirado el cambio unos cuantos miles de kilómetros. Ya veremos el aspecto de estas piezas cuando toque cambiarlas, aunque de momento estoy muy contento con el cambio y espero que hasta dentro de tres años no tenga que preocuparme por ello.

Un saludo a todos.

domingo, 8 de noviembre de 2015

Y también llegó el mantenimiento de los 300.000 km. [ACTUALIZADO]

En esta revisión, considerada de las completas, le tocaba cambiar ademas del aceite los filtros de gasoil, aceite, habitáculo y aire. En total casi dos horas de mano de obra y un precio total ligeramente superior al de las anteriores revisiones, a pesar de los numerosos descuentos en el material: 308 € del ala.

En este precio no entra la actualización del software porque, cuando llegó la nota sobre el tiempo de intervención del departamento eléctrico, ya estaba impresa la factura. Al final, lo han considerado una atención especial al cliente fiel; supongo... aunque puede que lo metan en la próxima factura.

Un mecánico probó el coche para detectar el ruido seco al cruzar pasos de cebra elevados pero no escuchó nada así que habrá que esperar a que el sonido sea mas acusado. Por otro lado vieron la sudoración en la caja de mariposas y me dijeron que no importaba mucho, que era bastante normal y que a otros también les da por sudar en la zona del intercooler; aunque no es mi caso.

Cuando recogí el coche tuvieron que meter el código de desbloqueo de la radio porque al cargar el software se borró todo; incluidas las memorias de las emisoras. Ahora el Bluetooth funciona bien aunque es posible que solo sea porque el truco está, según me dijo el técnico, en contestar NO a la pregunta sobre si se desea cargar la agenda del teléfono en la memoria del coche. Parece ser que hace ya un tiempo los contactos del teléfono llevan incluidos muchos otros datos que la importación del Scenic no sabe procesar y se bloquea.



Parece mentira pero el coche tiene un sonido mas redondo tras las revisiones y se agradece aunque le dure pocos kilómetros.

Algo que no había comentado hasta ahora y que me parece importante: como sabéis mis trayectos de trabajo son siempre los mismos y bajo condiciones de trafico muy parecidas. Ademas mis datos de consumo no se circunscriben a un solo deposito, ni a una sola estación del año; cada consumo medio lo calculo cada 10.000 km o más.

El anterior computo de 10.000 km comenzó a primeros de agosto y coincidió cuando ya llevaba montados los cuatro neumáticos GoodYear EfficientGrip que tienen muy buena calificación en el apartado de consumo. Como fui de vacaciones a velocidades de autopista el consumo en esos dos primeros depósitos se disparo hasta los 6 litros. En los sucesivos depósitos, ya yendo al trabajo, la media de consumo fue descendiendo hasta los 5 litros en los que acabó la serie de 10.0000 km; todo un récord.

Hace dos semanas empecé otra serie de 10.000 km, aun no he anotado los anteriores en el Histórico de Consumos, y comprobé como en estos dos primeros depósitos estoy consiguiendo una media entre 4.6 L/100km sin hacer nada que no hiciera hasta ahora. Sin duda es obra de los nuevos neumáticos y de su calificación.



Me ha dejado sorprendido ya que nunca he creído demasiado en las bondades reales de este tipo de neumáticos "ahorradores de combustible". Si esto se confirma en el resto de la serie de 10.000 km, el ahorro en combustible rondaría los 152 € en 40.000 km y eso haciendo los cálculos en el peor de los casos; es decir, considerando que antes consumía solo 5 L/100km. Otra cosa es si llegaré a hacer esos kilómetros.

El día 16 de noviembre tengo cita para el cambio de correa de distribución y elementos satélites: bomba de agua, correa auxiliar, etc. Daré cumplida cuenta en este blog.

Hasta ese día, un saludo a todos.

Actualización 17-11-2015:

 Ya ha pasado una semana desde que hice el mantenimiento en Renault y escuchando un Podcast de la cadena SER, emitieron una cuña publicitaria sobre Renault; algo así como: "...si haces el mantenimiento de tu coche en Renault te llevas una cesta de Navidad".



Entré raudo en la pagina de Renault Servicios para corroborar la existencia del anuncio, no sea que se refiera a un anuncio local y que solo valga para talleres de Madrid. Sin embargo es cierto, pero para los 15.000 primeros. Leí las bases y como cumplía todos los requisitos me lleve la flamante cesta no sin antes ver la cara de estupefacción del responsable de taller que no sabia nada de dicha promoción.



Bueno, lo de flamante es una exageración. Nada que ver con la que me dieron por el mismo motivo en 2013 y  que tenia tres botellas, dulces, etc. A la vista están para que las comparéis:

Cesta 2015
Cesta 2013
En todo caso, "a caballo regalado no le mires el diente".




lunes, 19 de octubre de 2015

Peripecias hasta llegar a los 300.000km

Bueno, desde el verano han pasado unas cuantas cosas que quiero comentar antes de que las próximas entradas acaparen toda vuestra atención ya que, en un periodo de 30 días, tendré que hacer el mantenimiento de los 300.000 km y el segundo cambio de las correas de distribución.

Hoy ya paso de los 300.000 km
En la entrada anterior del blog dejé pasada la I.T.V. con un pequeño borrón en el expediente que subsané inmediatamente. Ya con neumáticos nuevos y con el beneplácito de la administración me dispuse a afrontar el viaje de vacaciones con total seguridad. Fueron 1700 km entre ida y vuelta por autopistas del norte en las que la Scenic no desfalleció en ningún momento ni tuvo la mas mínima incidencia o queja. Bueno, queja si; en todo caso lo ya sabido: un extra consumo de aceite que ocurre cuando las altas revoluciones se mantienen durante mucho tiempo. A velocidades legales por autopista la Scenic pasa de las 2800 RPM y eso durante horas hace que el mensaje llegue tarde o temprano.

Aviso de falta de aceite
Los que seguís mi "histórico de consumos" veréis que los consumos en los trayectos diarios al trabajo son muy contenidos. Para conseguirlo basta con conducir como si no existiera el freno, anticipándose a los eventos que se producen en el trafico diario. Sin embargo no puedo obviar que en estos trayectos nunca sobrepaso los 110 km/h; incluso por autopista. Así que estas vacaciones decidí hacer una excepción y así recordar el consumo real de este coche. Por delante tenia 700 km de ida y otro tanto de vuelta para comprobar, con el control de velocidad activado a 126 km/h, que no sobrepasé en ningún momento los 6 litros por cada 100 km. La media de velocidad resultante fue de 109 km/h ya que las aproximaciones a los peajes restan a la media total. Eso si, hechos con sumo gusto pues los precios del gasoil este verano han sido de los mas bajos que recuerdo en algunos años.

Precios a la baja en el gasoil
El tiempo en el camping pasa lentamente, da tiempo para todo; para pasear, para leer, para echar la siesta, para echar un vistazo al motor...vaya; no me había fijado pero una pequeña sudoración que tenía en un tubo se ha convertido en un "asunto sucio". Donde han quedado aquellos tiempos en los que los talleres de vez en cuando, como si se tratase de una operación de mantenimiento mas, petroleaban el motor y lo dejaban reluciente. Creo que voy a preguntarle al mecánico en la próxima revisión a ver si lo ve mal.

Al principio se notaba una cierta sudoración

Hoy en día tiene peor pinta
Al final las vacaciones fueron como era de esperar: cortas. Una vez de nuevo en el día a día la Scenic me regaló otro de sus mensajes: "Pinchazo".

Aviso de posible pinchazo
Lo llevé al taller Renault Gaursa de Durango. Les costó mucho encontrar por donde perdía aire; la verdad es que era muy poco. Era muy cerca del flanco, en la base de uno de los surcos y la verdad ahora con perspectiva creo que se trataba de un fallo del propio neumático. El problema es que necesitas que te lo reparen y entonces hacen el agujero mas grande para meter el taco y eliminan toda evidencia para una posible reclamación.

Detalle del taco y de la deformación que ha salido
Para rematar la faena, al meter el punzón para lijar el agujero, rompieron algún refuerzo del flanco con lo que al hinchar la rueda apareció un huevo. Aun así les quedé muy agradecido ya que no me cobraron nada por la intervención.

Ganas ya le pusieron
Pasados unos días, vi que seguía perdiendo aire así que preferí sustituir los dos neumáticos traseros. Esta vez pedí presupuesto directamente a "La Cadena Sport" y cuando me los fueron a colocar vimos que la profundidad del dibujo era parecida al del neumático izquierdo que estaba bien. Al fin y al cabo solo tenían 7000 km así que dejé el neumático trasero izquierdo sin cambiar. En la siguiente imagen se puede apreciar que la profundidad del surco pasados esos kilómetros con respecto al neumático nuevo de la derecha.

Izquierda el viejo, derecha el nuevo
Otra cosa que detecté mientras el coche estaba subido en el elevador fue que el guardapolvos del amortiguador delantero izquierdo está roto. No se hasta que punto afectará al propio amortiguador pero hace tiempo que hace mas ruidos de los esperados.

Detalle del guardapolvos
La broma me salió por 272.35€, incluido el montaje. Ahora guardo en el garaje una rueda nueva y me "deben" el montaje cuando la lleve a cambiar. Fijándome en la que tengo en el garaje esta rueda GoodYear no tiene un flanco muy consistente. En otras, es duro y poco flexible. Sin embargo esta parece no tener alambres que refuercen los laterales.

Bueno la próxima entrada será una que combinará el mantenimiento general, en el que me tienen que actualizar el software del Bluetooth por el problema que tuve con el móvil nuevo, y el cambio de la correa de distribución y bomba que realizaré en el taller que, en la una anterior ocasión, ya me lo hizo con un gran resultado. La diferencia está en los 475€ que cobran frente a los 700€ que quiere cobrarme el concesionario Renault.

Un saludo a todos.

viernes, 31 de julio de 2015

288.000 km: Segunda Inspeccion Técnica de Vehiculos



Ya tocaba pasar la ITV; han pasado dos años y casi 100.000 km desde la ultima vez que fui. En el anterior post os comentaba como los neumáticos delanteros andaban un poco justos de profundidad, unos 2 mm, pero decidí pasarla por ver si los inspectores son implacables con estas cosas. También lo hice porque mi mujer, al enseñarle los neumáticos y comentarle que debía cambiarlos, me contestó que los veía bien; y como no sé si lo decía porque las condiciones de luminosidad eran aceptables para la visión o realmente porque estaban en buenas condiciones, decidí que el mejor arbitro para esta contienda era el inspector de la ITV.



Tras pasar por caja y pagar 46,69€ hice cola durante 30 minutos. Esta vez tuve la precaución de anular las luces diurnas ya que en la anterior ocasión se quedaron un poco moscas de su aspecto y como reza el refrán: "ojos que no ven, corazón que no siente".


Lo único a destacar en la inspección fue que la efectividad de los amortiguadores era mucho menor que en la anterior ocasión en la que fui con los originales mucho mas desgastados. Estos no hace tanto que los cambie así que podríamos achacarlo a unos recambios de inferior calidad o a unas carreteras en peor estado de conservación. Yo me inclino por esto ultimo.

Al acabar la inspección visual, sin galgas ni herramientas que lo corroboren, el operario me comenta que los neumáticos están muy desgastados y son peligrosos. Según la normativa tienen que tener una profundidad mayor de 1,6 mm en los surcos centrales y cuando los medí tenían entre entre 2 y 2,2 mm. Tampoco era cuestión de discutir por dos o tres mil kilómetros mas.

Lo curioso es que se trata de una falta leve por lo que solo queda apuntada en la ficha de inspección. Pensaba que los fallos de neumático, siempre he oído aquello de que son la unión de nuestro vehículo con la carretera, se consideraban graves.



Así que según salí de allí llame a La Cadena Sport para que me ofertaran otro par de neumáticos GoodYear EfficientGrip Performance, iguales a los que puse en el tren trasero pocos días antes. La sorpresa fue que habían bajado de precio así que en tres días ya tenia los delanteros cambiados.

Estas vacaciones haré un viaje largo de 1600 km por lo que volveré a comprobar el consumo de aceite. De momento, después de 20.000 km desde la ultima revisión, no he notado que el nivel haya bajado de forma apreciable.

Y el próximo post, toco madera para que no se dé ningún contratiempo previo, revisión y cambio de la correa de distribución. Como comenté en su día, a pesar de que el intervalo es de 160.000 km, prefiero hacer dos cambios y no apurar; a los 150.000 km y a los 300.000 km de tal forma que sobre los 450.000 km, si todo va bien, jubile este coche. Por cierto, en septiembre me van a dejar un Auris Touring Sport Hibrido de los nuevos durante dos días para hacer mi prueba de consumo. Espero que sea mejor que la del modelo viejo.

Un saludo y felices vacaciones...y buen regreso. 

viernes, 12 de junio de 2015

284.700 km: toca cambio de los neumáticos traseros

Hacia ya un tiempo que había observado como los neumáticos traseros tenían un desgaste irregular por el flanco mas exterior. Después de algo mas de un año, ha llegado el momento de cambiarlos ya que, aunque en el resto de la banda de rodadura todavía tiene mas de los 1.6 mm legales, en los flancos externos ha desaparecido completamente el surco.
Toca probar unos GoodYear
Otra de los motivos por los que no he estirado su vida util es que en uno de ellos habia tenido un pinchazo y el sistema de parche, con la poca goma que quedaba, no me daba confianza.
Detalle del parche
En el aspecto de la durabilidad estos Michelin Primacy 3 no han resultado tan buenos como sus antecesores Michelin HP Primacy. Es cierto que han rebajado el precio sustancialmente; de los 160€ que costaban en su día, a los actuales 120€ que cuestan estos otros. Sin embargo, mientras que aquellos, en el eje trasero duraban mas de 75.000km estos solo han llegado a los 60.000km. Y el eje delantero, que también monta unas Premacy 3, van por el mismo camino y posiblemente los cambiaré con 45.000km por aquello de que los neumáticos del eje tractor se gastan mas rápidamente.
Desgaste en la banda externa
Últimamente he leído muy buenas criticas sobre el GoodYear EfficientGrip Performance asi que he decidido probar. Un inciso: ¿por qué cada vez ponen nombres mas largos y agresivos? Dentro de poco van a necesitar ruedas de 19 pulgadas para que les quepa tanto nombre.

Bromas a parte estos neumáticos prometen, ya veremos la cruda realidad, una buena durabilidad, excelente comportamiento en mojado, ahorro en el consumo de carburante y un menor ruido de rodadura que la competencia.

En cuanto al consumo, he visto como algunos probadores se aventuran a dar cifras de ahorro; yo no lo haré. Pienso que es muy difícil comparar el consumo de diferentes neumáticos manteniendo estables parámetros tales como velocidad, estilo de conducción o temperatura durante los mas de 40.000km que duran.

Por otro lado el ruido de rodadura se verifica con neumáticos nuevos y he detectado que en la mayoría de ellos este valor se degrada en cuanto pasan unos pocos miles de kilómetros. Así que en mi caso, teniendo en cuenta el tipo de conducción suave que hago, mi mejor indicador es el de durabilidad; siendo consciente de que ni el ruido, ni el agarre ni el consumo serán tan buenos como prometen.


Dentro del taller
Como en otras ocasiones, mi taller "oficial" para este tipo de intervenciones es La Cadena Sport de Trapaga. Esta vez, por un problema de comunicación, me han costado 5€ mas que si los hubiera pedido en la web de Muchoneumatico. Les llamé por teléfono para verificar si el precio de montaje seguía siendo el mismo (12€ por rueda) y me dieron el precio junto con el de los neumáticos...quedé desconcertado y acepté. Luego sacando cuentas he visto que me han cobrado algo más.


En fin, creo que nos volveremos a ver las caras dentro de un par de meses cuando tenga que cambiar los neumáticos delanteros. Mientras tanto, que paséis unas buenas vacaciones y atención a la carretera.

Un saludo.

lunes, 6 de abril de 2015

Prueba del Toyota Auris HSD

Toyota Auris HSD 2011
Hace tiempo que vengo considerando que mi próximo coche sea un híbrido porque, según la publicidad, consumen poco, son silenciosos y menos contaminantes que los “petroleros”; además, el mas avanzado de los híbridos es un Toyota, símbolo de calidad y fiabilidad.

Todos sabemos que la publicidad, como norma general, es engañosa o por lo menos no dice toda la verdad así que he buscado en otras fuentes de información, principalmente foros, el grado de satisfacción de sus propietarios.

Me he encontrado una satisfacción general de uso pero muchos usuarios que no consiguen, ni de lejos, los consumos que Toyota promete; de hecho, muchos coinciden en que el consumo depende de muchos factores ajenos al estilo de conducción. Por ejemplo, al Auris le sientan mal los puertos de montaña y los recorridos a velocidad elevada.

Es por todo ello que decidí probar uno de estos coches durante un par de días en mi trayecto habitual al trabajo. Ya he comentado en otras ocasiones que es un trayecto fijo, en el que las condiciones del tráfico son siempre las mismas y no hay apenas variaciones en mi estilo de conducción. Sin mirar al reloj para intentar recuperar el tiempo perdido siempre necesito entre 70 y 75 minutos para ir al trabajo y unos cinco minutos más para regresar a casa. Y es que en la Scenic ir pendiente del reloj es dificil; no hay que olvidar que no puedes saber qué hora es si no enciendes la pantalla del navegador. Alguna ventaja tenía que tener.

El primer intento lo hice con el concesionario de Toyota y Lexus en Leioa, Japan Car, porque supuse se desvivirían por venderme las bondades de este coche. Fui atendido por un joven y atento comercial que me presentó brevemente el vehículo y también me reconoció que “él de motores no sabía mucho”. A la pregunta de si podría probar el coche de una forma más exhaustiva durante un par de días, incluso estando dispuesto a pagar un alquiler, me respondió que no disponían de ninguno durante tanto tiempo. También le pregunté, esta vez al que parecía su jefe, si sabían de alguna empresa de alquiler que hubieran comprado híbridos de su marca pero me respondió, la verdad es que con profunda desgana, que no tenía constancia.

El segundo intento fue contactando con varias empresas de alquiler que si bien tenían alguna unidad híbrida disponible estas se encontraban en Madrid o Barcelona. En todo caso no podían asegurarme que en un plazo razonable se desplazaran a Bilbao.

Una manera sensata de compartir coche
Casi había tirado la toalla cuando encontré una iniciativa de alquiler de vehículos en Uribe Kosta llamada Ukanauto. Si eres mayor de edad, con más de seis puntos en el carnet de conducir, que no tengas deudas con el fisco y titular de una cuenta bancaria puedes ser socio. Tienen varios Toyota para alquilar; unos Auris híbridos de la generación anterior y unos Yaris de gasolina. Como reza en su página web “Ukanauto. Una manera mas sensata y responsable de compartir coche. Utilizando y pagando solo lo indispensable”. Esta empresa presta su servicios a menos de diez kilómetros de Japan Car; ver para creer.

El sistema es muy sencillo; pagas una cuota anual de 30€ por ser socio y, una vez te han facilitado tus claves de acceso, puedes reservar en su página web el vehículo que quieras. Estos coches están aparcados en diferentes calles de Armintza, Sopelana, Berango, Gorliz y Urduliz donde tienes que recogerlos y dejarlos tras su uso. El tiempo mínimo de alquiler es una hora y el máximo tres días.

Una vez reservada una franja de horas de utilización y seleccionado un coche en concreto, procederemos a buscarlo a su aparcamiento. A la hora de recogida, pasando nuestra tarjeta de socio por un lector inductivo colocado en el salpicadero, podemos abrir el vehículo. Una vez dentro, existe un terminal en la guantera en el que debemos introducir nuestro pin secreto para poder activar el vehículo durante el periodo de horas o días reservado. En dicho terminal cuelga un mando a distancia que utilizaremos para abrir y cerrar el vehículo normalmente, hasta la fecha de devolución. El terminal también tiene una tarjeta de crédito alojada en una ranura que utilizaremos para rellenar el depósito de combustible.

Terminal de control
Todos estos movimientos son monitorizados en las oficinas del servicio de tal forma que saben en todo momento si no has dejado la tarjeta de crédito en su sitio después de repostar, si has dejado el coche fuera del horario alquilado o cuántos kilómetros llevas recorridos. También existe una tecla de asistencia en el terminal que te pone en comunicación directa con las oficinas del servicio por si tuvieras cualquier problema o incidencia.

Cada hora de alquiler cuesta 3€ más otros 0,22€ por kilometro recorrido. Si se alquila por 24 horas no se pagan más que 36€ por día completo. Esto incluye impuestos, gasolina y seguro a todo riesgo. Toda la prueba me ha costado 233,84€, recorriendo 422km, así que podemos concluir con que no es un sistema particularmente barato.

Coste del alquiler
El Toyota elegido es un Auris Hibrido matriculado en septiembre de 2011, con 7800 kilómetros recorridos y que calza unos neumáticos 215/45-R17 que sin duda no contribuyen al ahorro de combustible pero que son muy parecidos, para establecer una comparación, a los 215/55-R17 que lleva la Scenic.

Toyota Auris HSD de la prueba
En el Scenic la respuesta a la presión sobre el acelerador se presenta lenta, con cierta elasticidad,  gomosa. Se debe, en gran parte, a su elevado peso y a su pequeño motor de 105CV. Este Toyota, a pesar de tener sobre el papel 136CV, también muestra una sensación extraña al acelerar.

Como hace una gestión del motor térmico y eléctrico por su cuenta y riesgo, el sonido del motor no es proporcional a la presión ejercida sobre el acelerador. Y despista un montón que en zonas con pendientes el motor térmico ruja, casi al límite del corte de inyección; mientras que llaneando, a la misma velocidad, el sonido sea casi imperceptible.

Gestión de los motores térmico y eléctrico
En absoluto es un coche silencioso. Hay gente que opina que, como es tan silencioso, cuando suena el motor nos parece más ruidoso de lo que en realidad es. Sin embargo creo que a velocidades bajas y en llano, hasta unos 80 km/h, no va del todo mal, incluso a velocidades más bajas, solo funciona el eléctrico y entonces solo se oye el ruido de rodadura. Pero pasando de 80 km/h o encarando moderadas pendientes el ruido es muy acusado y bronco. Este es el primer argumento de venta que se me ha caído de la lista.

Sin embargo, el cambio automático es muy cómodo y simple: D para adelante, R para atrás y un posición B muy útil si queremos un extra de retención bajando puertos de montaña.

Cambio automático y modos de conducción
He intentado una conducción muy parecida a la que hago habitualmente; es decir, conducir como si no llevara frenos. Eso implica hacer un ejercicio de anticipación a todos los obstáculos e incidencias que puedas encontrarte por el camino como semáforos, rotondas, vehículos lentos, etc., de tal forma que el uso del freno sea mínimo. También he usado el control de crucero, herramienta muy cómoda e imprescindible en un vehículo moderno pero que penaliza el consumo en ciertas condiciones. No es un elemento del que vaya a prescindir así que lo he utilizado como habitualmente; es decir, mis primeros 12 kilómetros lo fijo a 92 km/h, luego otros 6 kilómetros a 82 km/h y por ultimo 14 kilómetros a 110 km/h. El resto del recorrido, por carreteras nacionales a velocidad variable no pasando de 90 km/h.

Funcionando en modo eléctrico
El hecho de que el control de velocidad del Scenic sea digital me tiene muy mal acostumbrado. En el Toyota tienes que decidir en qué punto, por donde pasa la aguja del velocímetro, quieres mantener tu velocidad. Encima está la manía que tienen los fabricantes de hacer velocímetros con un fondo de escala de 240 km/h. Esto hace que cada grado en el desplazamiento de la aguja supongan 5 ó 6 kilómetros de diferencia. Este coche no pasa de los 180 km/h así que si ese fuera el fondo de escala ganaría en precisión.

Otro detalle que me dejó chafado es que en el arranque de la mañana, después de dejar descansando el coche toda la noche, siempre funciona el motor de gasolina en los primeros minutos; aunque la batería este totalmente cargada. Creía que iba a poder salir del garaje sigilosamente en modo eléctrico sin que se enterara mi familia que duerme un piso más arriba. Segundo argumento de venta que se cae de la lista.

En el primer trayecto, una vez reseteado el ordenador de a bordo y llenado el depósito a tope, que ha consistido en bajar una cuesta pronunciada por autopista, tomar la siguiente salida y volver de nuevo a subir lo que antes había bajado más algún que otro kilómetro por ciudad, en total 14.8 kilómetros, el consumo medio estaba en 3.6 litros; no parece un mal comienzo.

Un buen comienzo...
De hecho una de las cosas que más sorprenden, al contrario de lo que ocurre con el Scenic y diría que con cualquier otro coche, es que cuando callejeamos por la ciudad el consumo baja. Es el terreno donde mejor se desenvuelve este coche; la batería se ha ido cargando en todas nuestras ineficiencias, al frenar, al bajar pendientes, en retención, etc. y toda esa energía, que se hubiera desaprovechado, se entrega a bajas velocidades en modo casi exclusivamente eléctrico. El silencio cuando detienes el coche y la suavidad con la que inicia la marcha, tanto en modo eléctrico como en térmico, es excepcional.

No voy a hablar del confort interior ni de su amplitud ya que es un modelo superado y que en 2015, su generación posterior, ya ha tenido un primer restilyng. Si me ha parecido algo pobre la iluminación y el hecho de que el Xenon solo esté disponible para el acabado más alto de la gama. También quiero criticar que todos los textos y serigrafías del vehículo están en ingles. No soy nada chovinista pero creo que si los demás lo hacen en español o por lo menos utilizan signos e iconos más o menos entendibles no sé porqué Toyota, también lo hacen Honda y Chrysler, no puede hacerlo.

Demasiado ingles escrito
Después de los casi 400km de prueba que le he hecho puedo decir que el hecho de entrar en ciudad en modo eléctrico y recorrer más de dos kilómetros exclusivamente con la energía eléctrica que ha almacenado en la bajada del puerto de montaña es una gozada; el ser consciente de que toda esa energía que habitualmente se desaprovecha tiene su utilidad. Sin embargo, tras todos esos kilómetros conduciendo igual que lo hago con la Scenic y tratándose de un coche menos pesado y con una aerodinámica mejor, suponía que los consumos serian mucho menores.

Y es que 4.4 litros no me parecen un mal consumo medio para toda la prueba pero pensaba en una cifra menor, más cercana a los 4 litros. Al fin y al cabo, en su día tuve la oportunidad de conducir un Megane con un motor 1.5dCi y solo me gastó 5 litros de media.

Consumo total de la prueba según el ordenador de abordo
Está claro que en este tipo de coches el perfil del terreno recorrido y las velocidades máximas a las que se circula es determinante. En el caso del diesel penaliza mucho la ciudad pero en cambio los recorridos interurbanos y de autopista pesan mucho menos.

La asistencia del motor eléctrico sobre el motor de gasolina es testimonial o inexistente por encima de velocidades de 90km/h y entonces se penaliza mucho el consumo. Lo mismo ocurre en puertos de montaña donde es el motor térmico el que trabaja. Es cierto que a velocidades medias y bajas o en llano los consumos del motor térmico se reducen mucho si asiste el motor eléctrico por eso es muy importante los recorridos de cada uno.

Motor térmico
Tampoco le podemos pedir más a un motor de gasolina que normalmente, por el menor poder energético con respecto al gasoil, consumen siempre más. Y en términos absolutos, consumir 4.5 litros de media para un gasolina es algo excepcional incluso si lo utilizamos de forma un poco “descuidada” no creo que la media pase de los 6.5 litros lo cual está muy bien para un gasolina.

Estamos hablando de 4.5 litros de media frente a los 5.2 litros que le saco habitualmente a mi Scenic que pesa 65 kg más y tiene un CX mucho peor. Por no hablar de lo lejos que está el Toyota de los consumos oficiales (3.5/3.6/3.6) con respecto al Scenic (5.9/4.6/5.1).

Corazón del motor eléctrico
La puntilla viene cuando compruebo lo que realmente ha consumido. De nuevo lleno el depósito hasta arriba y le caben 19.21 litros que con los 395 kilómetros recorridos hacen una media de 4.86 litros. Recordemos que todas mis medias con el Scenic son siempre reales con lo que la diferencia es todavía menor. Con una conducción todavía más cuidada, sin usar el control de crucero y aprovechando de otra manera la energía almacenada, hay muchas disertaciones en los foros de cómo llevar este vehículo en el nirvana de la eficiencia, será posible bajar aun más el consumo pero se trata de ser eficiente sin hacer que el viaje sea estresante y como he comentado anteriormente no estoy dispuesto a renunciar al comodísimo control de velocidad.

Consumo real de la prueba
Por todo ello concluyo con que lo que más me han gustado es el cambio automático, la calidad percibida, los ajustes y la manera de cómo gestiona los dos motores. No me ha gustado lo ruidoso que es el motor térmico en ciertas ocasiones, para mi trayecto habitual en demasiadas ocasiones, y el resultado final de ahorro en combustible con respecto al precio que hay que pagar por tener esta tecnología.

Seguiremos buscando por otro lado; por ejemplo en los nuevos motores Peugeot 1.6 BlueHDI, Volvo D2, etc.