Os comenté hace unos días que tenia un ruido sordo en la amortiguación delantera derecha. Pues bien, después de llevarlo al taller dos veces han dado con el problema. Se trataba de la tuerca que sujeta el amortiguador en su asiento y que estaba "deficientemente" apretada. Por precaución me han reapretado los tensores de la dirección.
De momento el resto va como la seda; le voy cogiendo el truco a las seis marchas y ya estiro las revoluciones sin contemplaciones. El consumo sigue bajando; ahora anda por los 5.6 litros.
El personal del taller ha sido muy amable y me han atendido con gran profesionalidad. De momento un 10, parece que saben lo que tienen entre manos.