Le
tocaba el mantenimiento “suave”. Han cambiado el aceite, filtro de aceite y
filtro del habitáculo. Además, en la inspección de los famosos 22 puntos, han
cambiado las dos lámparas de la matricula. Como siempre, la cosa no ha bajado
de los 171€ pero se supone que han revisado un montón de cosas que pueden
comprometer la visibilidad y la seguridad.
Creo que Renault se
preocupa para que este tipo de revisiones, la mayoría de las veces consistentes
en una inspección visual, se hagan correctamente. Para que los talleres de la
marca, en función de la carga de trabajo, no caigan en la tentación de cobrarla
y no realizarla. Para ello, Renault queda con el cliente que sabe tiene que
pasar la revisión y le ofrece 150€ a cambio de “trucarle” alguna cosa en el
coche que debiera de detectarse en la inspección. Por ejemplo, deshinchar un
poco una rueda, quitar liquido de frenos, etc. De esta forma detectan malas prácticas
de los talleres concesionarios.
Una cesta llena de "sorpresas" |
La
sorpresa vino después, al abonar la revisión. Aunque Renault lo publicita en su
web, no me había enterado asi que cuando me dieron una caja a modo de cesta de
Navidad quedé gratamente impresionado. No quiero parecer desagradecido pero, después
de ver el contenido y las marcas de los productos, hubiera preferido que me
hubieran descontado 50€ como en alguna otra ocasión.
No conozco ninguna marca |
El problema de consumo excesivo de aceite que detectaron cuando cambie
las pastillas, hace ya 15.000km, se ha quedado en nada. Creo que se debió a que,
la última vez que me cambiaron el aceite, no llenaron bien. En estos kilómetros
la varilla siempre ha marcado lo mismo y mi forma de conducir y los trayectos
no han variado.
El nivel no ha variado |
Todo el mundo conoce la leyenda urbana de la “chica de la curva”…pues la
semana pasada la llevé atrás, en mi coche. Fueron unos escasos cuatro kilómetros
de carretera serpenteante al borde del acantilado sobre las cinco y media de la
mañana. De repente un aviso de cinturón trasero desabrochado. Creo que no
soportó mi forma de conducir tan tranquila y se tiró por el acantilado.
La chica de la curva |
Bromas
aparte, parece ser que el sensor del cinturón se quedó atascado cuando la tarde
anterior mi hijo se soltó el cinturón y se desbloqueó al día siguiente en esos
primeros kilómetros de marcha.
Bueno,
si todo va como espero, la próxima entrada del blog será dentro de 4 meses; con
240.000km.
Un saludo a todos y
hasta pronto!