sábado, 3 de junio de 2017

Percance a los 375.000 km y decisión drástica


Al lado del maldito bordillo.
Como os comenté en el anterior post, no tenía muy claro si la detección de pinchazo se hacía con un sistema diferente al de la lectura de presión. De hecho muchos otros fabricantes no miden la presión de cada neumático sino que aprovechan otros sensores, ya presentes en el vehículo, para detectar de una forma ciertamente efectiva los pinchazos, o por lo menos la bajada repentina de la presión.

Los kilómetros del percance.

Como ya me habían puesto una válvula normal en una de las ruedas procedí a deshincharla al lado del surtidor de aire de una gasolinera. Luego conduje unos metros pero el coche no detectó nada. Probé a deshincharla un poco mas y realicé otra vez la misma operación y tampoco ocurrió nada. Así que mi gozo en un pozo; creía que las válvulas con medidor de presión eran independientes al aviso de pinchazo y nada mas lejos de la realidad.

Prueba de pinchazo provocado.

Estaba yo con estos pensamientos sobre si reparar la centralita o esperar al cambio de neumáticos para hacer lo propio con todas las válvulas cuando, en una maniobra de aparcamiento muy a lo americano, reventé la rueda delantera izquierda. A los americanos siempre les sale bien, encaran de frente la acera y van poniendo el coche paralelo al bordillo, a una distancia prudencial, de forma progresiva y avanzando un montón de metros. Con lo que no contaba es que, por un lado, no tenía tanto recorrido para irme poniendo en paralelo, así que forcé la aproximación, y por otro lado, no conté con el canto tan cortante de un bordillo recién puesto. El resultado fue un "siete" de grandes proporciones en la rueda.


Un "siete" en toda regla.

Pude comprobar como los flancos de las EfficientGrip son bastante débiles. Solo hay goma, bastante poca cantidad por cierto, y una especie de cuerda de nylon. No esperéis encontrar los típicos hilos de acero. Supongo que es cuestión de precio aunque no por esto pienso que sean malos; los seguiría recomendando, pero hay que ser cuidadoso con ellos.
 

Segundo neumático fuera de juego.

El caso es que los neumáticos delanteros solo tenían 33.000 km y aun les quedaban unos cuantos kilómetros por hacer pero en julio tengo que pasar la ITV y no querían que me dijesen nada por tener neumáticos con un desgaste tan diferente. Por otro lado, los traseros andaban ya, uno por los 90.000 km y el otro ya con 75.000 km. Así que decidí cambiar todos, incluidas las válvulas con sensor de presión por unas normales.

Ya no hay marcha atrás.

Como hace ya unos cuantos años, la operación de sustitución la realice en La Cadena Sport de Trápaga. Tuvieron que pedir los neumáticos a Alemania , de nuevo unos EfficientGrip, y con el cambio de válvulas y la mano de obra me costaron 539,08 €; unos 134 € la unidad así que me hicieron un buen precio.
 
En el asunto de los sensores ya no hay marcha atrás, solo me queda pasar por la Renault y pedirles que hagan desaparecer el error de la pantalla del ordenador del coche. Al final tengo claro que era de una mala configuración y no de que el modulo de control se haya estropeado. Lo creo porque cuando salí del taller, recién cambiados los cuatro neumáticos, el ordenador me indicaba que tenía un pinchazo en dos de las ruedas. Mi sorpresa fue mayúscula pero luego entendí el porqué: resulta que había dejado los sensores de presión en el maletero y aun los podía leer el control.

Ahora cree que llevo dos ruedas pinchadas.
Por eso sé que por lo menos una de sus funcionalidades, la de detectar un pinchazo, funcionaba bien; sin embargo, no han sabido dar con el problema de la lectura. Y eso me lleva a una reflexión que hace mucho tiempo me hago. En un futuro que ya es el presente, los talleres de coches tienen su talon de Aquiles en los profesionales que integran sus plantillas. Hasta ahora, lo mas especializado que tenían era un electricista, el chispas, que con un destornillador busca-polos y poco mas se enfrentaba a los problemas eléctricos de los coches.
 
Con la llegada de la electrónica los especialistas no han variado apenas en su perfil. Electricistas con conocimientos de electricidad que se ponen en manos del software de diagnostico del fabricante, con la esperanza de que una pantalla les diga que falla y como arreglarlo. Pero, ¿qué pasa cuando el software de diagnostico no está muy depurado?. Al fin y al cabo, para Renault el coche ya está vendido y sobre el que tiene la responsabilidad de solucionar el problema es el taller de la marca.
 
Por otro lado, un fallo de comunicaciones generalizado o el fallo de algunos sistemas puede provocar un fallo en otro sistema, como reacción pero no como causa. Así que con la llegada de los coches eléctricos e híbridos, las plantillas deberán hacer un reciclaje a lo bestia porque si no, la insatisfacción del cliente irá en aumento. Posiblemente les salvará el hecho de que los eléctricos tendrán menos fallos pero aun así se les presenta un futuro cargado de incertidumbres y oportunidades.

Por otro lado acabo de reflejar en el post de consumos el resultado de los últimos 20.000km. Ha salido un poco más alto de lo que habitualmente hago, 5.2 litros, pero ha coincidido con la apertura de un tramo de autovía en el que me ahorro 10 minutos de viaje a costa de ir a 100 o 120 km/h. Creo que en el próximo parcial se notará como vuelvo a estar sobre los 5 litros ya que he recibido una multa, que gustosamente he pagado, por ir a 117 km/h cuando debería ir a 80 km/h. Aunque no quiero justificarme en absoluto, de este tipo de limitaciones hablaré algún otro día.

Oscar, mi lector mas fiel, me ha pedido los datos de la luna que cambié en la ultima visita a CarGlass así que aquí os dejo la etiqueta:

Detalle de la luna cambiada en CarGlass
Y para los que les gusten los números curiosos en el cuentakilómetros, es lo que tiene hacer tantos kilómetros, aquí os va alguno:

 
Un saludo a todos y suerte en la carretera.