domingo, 21 de octubre de 2018

446.591 km: adelantando en kilometros al Passat


Hoy he alcanzado y sobrepasado en kilometraje al que llegó el Passat; por lo menos del que hay constancia fotográfica. Es seguro que hizo algún kilometro más, por lo menos para llegar al concesionario donde lo entregué, pero no creo que pasara de los 447.000km. También estoy seguro que podría haber hecho muchos más pero tuvo la desgracia de que topáramos con un plan PIVE de los buenos.


 
Llegamos a este día con unos cuantos defectos que ya no pienso solucionar, salvo que en la ITV me digan lo contrario, y que no desmerecen el resultado final. Casi todos, excepto el del asiento, se pueden arreglar con mas o menos dinero: 
  • Cuero del volante estropeado.
  • Parasol que "cae" de su posición.
  • Sensor de cinturón activo siempre.
  • Ruido, semejante a un "clak", al abrir puerta delantera.
  • El asiento del conductor no mantiene su altura.
  • Sensores de presión de neumáticos desactivados.
El próximo mes de noviembre se van a suceder una serie de intervenciones casi simultaneas. Cuando llegue a los 450.000 km, toca mantenimiento. Después de los dos últimos, que han coincidido con kilometrajes raros, estiraré el mantenimiento en casi 5000 km para dejarlo en esta cifra redonda. Me obligará a tapar el mensaje de "pasar por el taller" ya que es una luz muy intensa que molesta mucho por la noche. Cómo sabe invitarte "cariñosamente" la Renault a que pases por el taller y luego por caja.



También toca cambio de correa de distribución y sustitución de los neumáticos traseros. Eso significa que se prepara una factura de algo mas de 1.000 €. Y eso que dejo los amortiguadores, que ya pasan de los 260.000km, para cuando vaya a la ITV en julio de 2019.

El consumo sigue siendo excepcional. En la última serie de repostajes, que cubre los primeros ocho meses de 2018, llené el deposito con 1.684,71 litros, con precios entre 0,975 y 1,229 €/litro. En total gasté 1.802,50 € en gasoil con un consumo medio de 5.34 litros cada 100 kilómetros. Como la idea es sustituir este coche por un eléctrico, si extrapolo este consumo a unos 14 KWh cada 100km, que es lo que gasta un coche eléctrico, y los pago a la tarifa normal de unos 0,14 €/Kwh habría gastado 618,60 €; es decir, un ahorro de 1183,90 €. Muy a tener en cuenta cuando hablamos de amortizar un coche que, en general, tiene un sobrecoste de unos 12.000€ con respecto al equivalente en gasolina.

En este periodo también ha gastado algo mas de 1,5 litros de aceite pero, como se puede ver en el histórico de consumos, he conducido ligeramente más rápido en este periodo. Más autopista y autovía que es lo que hace se dispare el consumo de aceite.


 
Se ha encendido otra alarma de "Revisar automatismo iluminación" pero después de apagar y volver a encender el coche no se ha vuelto a reproducir. Las luces quedaron encendidas a pesar de salir de la penumbra del garaje a un día soleado. Buscando el problema en algunos foros del Megane, la gente hablaba de que en el mejor de los casos podía ser un problema de suciedad en el cristal. A pesar de usar los limpias con frecuencia, tenía un montón de pequeñas motas de resina que no quitaba. Todo ello por aparcar bajo algún árbol enfermo en el trabajo. Al eliminarlo con alcohol ya no ha vuelto a darme el fallo.


Otro fallo intermitente es el de la ayuda al aparcamiento trasero. De vez en cuando, al meter marcha atrás, en vez del pitido corto que avisa de la activación del sistema, suena uno muy largo y aparece el mensaje "Revisar ayuda al aparcamiento". Otras veces funciona bien. Es un problema porque a la que te despistes crees tenerlo activo y puedes darle un golpe sin piedad; esperando que suene la alarma cuando te acercas a un obstáculo.



A tenor de las imágenes, parece una nave descontrolada, cayendo en picado, con todas las alarmas saltando una tras otra. Pero son cosas que ocurren de vez en cuando, que sé de su relativa importancia y que ya me he acostumbrado a su aparición.

Si noto un poco menos de fuerza en el motor. Ya no aguanta la sexta a 80 km/h en pendientes prolongadas. Suele mejorar la semana siguiente al mantenimiento pero la alegría dura poco. Otra cosa que se ha agravado últimamente es que el techo solar vibra y suena más que antes en posición cerrada. Supongo que es un tema de la junta de goma que, al resecarse y retraerse por el paso del tiempo, no aprietan con firmeza el cristal y por eso vibra.

En fin, esto solo era un alto en el camino para celebrar un récord. Nunca tuve un coche tanto tiempo y con tantos kilómetros, así que es para celebrarlo.

Hasta la próxima!