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| Mi última avería |
Da mucha rabia tener que pagar una reparación de un coche que ya descansa en el desguace desde hace dos meses. No sé si recordareis los problemas de motor que tuve en marzo, justo antes de decretarse el estado de alarma. Tras un par de intentos consiguieron detectar cual era el problema y repararon la avería aunque, antes de pasarme la factura, me dejaron que probara bien el coche. El caso es que después vino el confinamiento, el teletrabajo y las vacaciones de verano y no me reincorporé al trabajo hasta el mes de septiembre, ya con el vehículo nuevo. Aun así me puse en contacto con el taller para recordarles que tenía pendiente una factura de la que aun no conocía el importe. Ya ha pasado un mes desde esa conversación.
Ayer me llamaron para que saldara mi deuda. Supongo que el taller también tuvo que rescatar sus partes horarios y sus albaranes para recordar en que había consistido la reparación de hace ya mas de siete meses. Pasé por la tarde, tras el trabajo, y liquidé una última factura de 311,54€ que ya he añadido al apartado de costes de mi Grand Scenic.
Como consuelo, el saber que ya no puedo tener una avería de este tipo en mi Peugeot e-208. También aproveché para despedirme de la gente del taller que tan amablemente me trató durante estos últimos 11 años y que hasta la última avería, han sido capaces de responder con cierta dosis de profesionalidad.
Este sí es el final de Mi Grand Scenic 2009. Gracias a todos por las visitas, por los comentarios y por el respeto. Si queréis, nos vemos en Mi Peugeot e-208 eléctrico.
